27/2/13

Hoy pregunto por tu nombre.


1
 
En la mesa del señor,
en la anciana mesa
de madera
del señor
no ha de faltar
una copa de vino
del día anterior,
una nueva
por este ser
que me yace
y la suma expresada
en tinta u óleo
de todo el placer al alcance
de un símbolo.

25/2/13

Caminos del reflejo argentino II.


Alejandra, Alejandra.
Alejandra, Alejandra.
Alejandra, Alejandra.
He pintado mi piel
con tu nombre
y he creído vivir.
  
"                                                    "
Caminos del espejo
(1962)
 
XI
 
Al negro sol del silencio las palabras se doraban.
 
XII
 
Pero el silencio es cierto. Por eso escribo. Estoy sola y escribo. No, no estoy sola. Hay alguien aquí que tiembla.
 
XIII
 
Aun si digo sol y luna y estrella me refiero a cosas que me suceden.
¿Y qué deseaba yo?
Deseaba un silencio perfecto.
Por eso hablo.
 
XIV
 
La noche tiene la forma de un grito de lobo.
 
XV
 
Delicia de perderse en la imagen presentida. Yo me levanté de mi cadáver, yo fui en busca de quien soy. Peregrina de mí, he ido hacia la que duerme en un país al viento.
 
XVI
 
Mi caída sin fin a mi caída sin fin en donde nadie me aguardó pues al mirar quién me aguardaba no vi otra cosa que a mí misma.
 
XVII
 
Algo caía en el silencio. Mi última palabra fue yo pero me refería al alba luminosa.
 
XVIII
 
Flores amarillas constelan un círculo de tierra azul. El agua tiembla llena de viento.
 
XIX
 
Deslumbramiento del día, pájaros amarillos en la mañana. Una mano desata tinieblas, una mano arrastra la cabellera de una ahogada que no cesa de pasar por el espejo. Volver a la memoria del cuerpo, he de volver a mis huesos en duelo, he de comprender lo que dice mi voz.
 
 
Alejandra Pizarnik

20/2/13

Caminos del reflejo argentino I.


Alejandra, Alejandra.
Alejandra, Alejandra.
Alejandra, Alejandra.
Llegué a pensar
que se trataba
de una obsesión.

"                                                                                                                "
Caminos del espejo
(1962)
 
I
 
Y sobre todo mirar con inocencia. Como si no pasara nada, lo cual es cierto.
 
II
 
Pero a ti quiero mirarte hasta que tu rostro se aleje de mi miedo como un pájaro del borde filoso de la noche.
 
III
 
Como una niña de tiza rosada en un muro muy viejo súbitamente borrado por la lluvia.
 
IV
 
Como cuando se abre una flor y revela el corazón que no tiene.
 
V
 
Todos los gestos de mi cuerpo y de mi voz para hacer de mí la ofrenda, el ramo que abandona el viento en el umbral.
 
VI
 
Cubre la memoria de tu cara con la máscara de la que serás y asusta a la niña que fuiste.
 
VII
 
La noche de los dos se dispersó con la niebla. Es la estación de los alimentos fríos.
 
VIII
 
Y la sed, mi memoria es de la sed, yo abajo, en el fondo, en el pozo, yo bebía, recuerdo.
 
IX
 
Caer como un animal herido en el lugar que iba a ser de revelaciones.
 
X
 
Como quien no quiere la cosa. Ninguna cosa. Boca cosida. Párpados cosidos. Me olvidé. Adentro el viento. Todo cerrado y el viento adentro.


Alejandra Pizarnik

19/2/13

Mientras caminaba por la calle.



Calle abajo con sonidos rojos
que nacen y renacen con las escrituras
y que deshacen su estricta forma
caminando por la calle.

12/2/13

La no acción que sigue a la queja.


The little boy lost
 
" 'Father, father, where are you going?
O do not walk so fast.
Speak father, speak to your little boy,
or else I shall be lost'.
 
The night was dark, no father was there;
The child was wet with dew;
The mire was deep, & the child did weep,
And away the vapour flew".
The little boy found

"The little boy lost in the lonely fen,
Led by the wand'ring light,
Began to cry, but God ever nigh,
Appear'd like his father in white.

He kissed the child & by the hand led
And to his mother brought,
Who in sorrow Pale, thro' the lonely Dale,
Her little boy weeping sought".




 
William Blake

7/2/13

Rodeados de conocidos.


Llaman al teléfono. Descuelgo.
¿Quién es? Pregunto.

No hay respuesta.

Llaman a la puerta. No abro.
¿Quién es? Pregunto.

No hay respuesta
y sin embargo sigo aquí, solo,
ante el espejo que no te invoca.

6/2/13

Corrientes de decepciones.



Corrientes de aire entre vagones,
¿quién respira?
 
Corrientes que soplan faldas
de tela barata,
golpean la carne fresca 
del viajero de papel.