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“Me meto en páginas a ver fotos y recetas, pero nunca
cocino. Es como porno gastronómico, "food porn" que lo llamaría el
chef Anthony Bourdain”.
Paula Móvil, natural de Guatemala, vive en Madrid
desde hace nueve años. Estudia comunicación y literatura en la universidad Saint
Louis de Madrid y está diplomada en traducción y arte dramático. Además, escribe
sobre gastronomía y restauración en su blog ‘Get in my belly!’. También
colabora para 365Cities y tiene página propia en 11870. Trabajó durante tres
meses en Guatevisión como reportera.
Abriste el blog ‘I want my baby back ribs’
el 5 de enero de 2011. ¿Qué te llevó a ello?
Crea
confusión, porque no está muy claro, pero el nombre del blog es ‘Get in my
belly!’ y ‘Iwantmybabybackribs.blogspot.com’ es la dirección. Lo que me hizo
abrir el blog fue mi necesidad de querer compartir todos los restaurantes y
bares a los que yo suelo ir a comer y que me gustan. Quería "compartir mis
conocimientos", por así decirlo. Aunque en un principio solamente ponía
fotografías de los sitios a los que iba, luego por demanda popular -y por
demanda popular me refiero a 3o 4 amigos-
decidí escribir mi "critica" de cada sitio. Mis amigos o
conocidos siempre me preguntaban por sitios adonde ir a comer, yo les
recomendaba y a ellos les encantaban los sitios que les decía, hasta se volvían
asiduos a ellos... Así que fue por eso que decidí abrir el blog, para
compartirlo con más gente.
¿Es más una afición o una costumbre
actualizarlo?
Una afición.
Sinceramente, muchas veces me he planteado dejarlo porque aunque veo que las estadísticas
son buenas no son lo que yo quisiera. La gente no me comenta, el Facebook de la
pagina apenas tiene 116 seguidores, así que más que nada lo actualizo por
mantener un registro de los lugares a los que voy. Ahora bien, costumbre sí es
ir a cualquier sitio y fotografiar lo que como, aunque intento no hacerlo mucho
para no aburrir a la gente con la que salgo a comer por ahí (risas).
¿Y por qué la comida?
Buena
pregunta… Pues porque desde 2007 o así empecé
a encontrar una pasión por comer, por descubrir sitios nuevos...Tenía a mi
mejor amiga que me enseñó restaurantes y platos que nunca había probado,
entonces para mí fue una cosa totalmente nueva también porque fui acumulando y
acumulando visitas a restaurantes varios y sentía que conocía sitios de los
cuales mucha gente no se enteraba, así que me volví una "experta" por
así decirlo. ¡Y ya que sabía algo acerca del tema pues qué más que explotarlo,
para algo que hago bien! (risas).
¿Y Tienes preferencias a la hora de comer?
Sí,
y muchas veces cuando no como lo que quiero el mal humor acecha. Soy muy
antojadiza, todo depende de mi humor y estado físico.
¿Y crees que se aprende a comer o se nace
sabiendo?
Se
aprende, se aprende. Yo no era lo que soy con los temas de comida. Antes no me
interesaba tanto la comida, ni le ponía tanto interés como ahora. Comía lo que
me habían enseñado, lo que veía en casa. Cuando salí de mi casa, de Guatemala,
adquirí ciertos hábitos nuevos aquí, en Madrid, aunque seguía más o menos los
mismos hábitos que en Guatemala, aunque me descontrolé un poco porque ya no sabía
cómo se "debía" comer, o qué era una buena alimentación. Fue después,
con esta amiga, que aprendí nuevos hábitos y nuevos alimentos y poco a poco
fueron cambiando mis preferencias a la hora de comer
Como has dicho antes, El tráfico de visitas
en tu blog es bastante considerable, una media de 600 visitas mensuales y un
total de más de 11.000. ¿Cómo has alcanzado estas cifras?
(Piensa durante unos segundos) Pues no
lo tengo muy claro. Creo que fue porque lo pongo en Facebook cada vez que
actualizo, porque a veces lo ponía en la página de Facebook de mi universidad
para que la gente lo viera, familiares y amigos; también escribo en ‘11870’ y, por
ejemplo, cuando me pusieron como "especialista en recomendaciones" en
‘11870’ en una newsletter que mandan cada jueves me subieron las visitas
muchísimo. Colaborar en ‘365 cities’ también ha ayudado. Estoy intentando comentar
en otros blogs para hacerme ver y en páginas de facebook, pero de momento en esa
labor estoy fracasando, ya que no tengo mucho tiempo y desespero con ese tipo
de cosas.
¿Crees que, en cierto modo, tu blog se ha
convertido en una especie de guía gastronómica?
No,
no lo creo (risas). En realidad dudo que la gente vaya a los restaurantes que
recomiendo. Me gustaría saber si alguno de los que lee el blog ha visitado
alguno de los lugares que recomiendo. Me imagino que los que lo leen son como
yo, que me meto en páginas a ver fotos y recetas, pero nunca cocino. Es como
porno gastronómico, "food porn" que lo llamaría el chef Anthony Bourdain.
¿Nunca cocinas?
Soy
yo la que cocina en casa todos los días, más que nada porque siempre tengo
antojos y lo que se me antoje se lo propongo a mi esposo, y si a él le apetece también
pues lo hago para cenar. Lo que pasa es que no hago cosas muy elaboradas porque
cuando veo todos los ingredientes que lleva la receta y el precio me echo para
atrás... Además, si en alguna receta hay que esperar más de una hora, paso
también. Me gustaría poder cocinar como mi madre y abuela, pero para eso necesito
tiempo… ¡Y una olla Express! Y de momento no pienso pagar por ella (risas). Suelo
más inventarme cosas para cocinar fáciles y rápidas.
¿Y dedicar un apartado del blog a la cocina
casera?
Las
pocas recetas que he hecho las he puesto en el blog, pero serán dos o tres. Luego
es que cuando cocino algo elaborado en casa se me olvida tomar fotos o soy un
poco cateta para escribir la receta paso a paso. Lo he pensado varias veces y
si tuviera más tiempo lo haría.
Normalmente
las entradas de tu blog están acompañadas de fotografías de comida. ¿Piensas
que la comida entra y ha de entrar por los ojos, o también hay que tener en
cuenta otros aspectos?
Por
lo ojos totalmente, aunque luego el olor es importante. Cuando hueles cómo
hacen el pan o algún caldo te llama la atención, pero si estás lleno, por
ejemplo, el olor te puede desagradar o dar asco, y si en cambio ves la comida
puedes estar llenísimo y decir “bueno,
un trocito probaría”, o bueno, eso creo yo (risas).
Además
de tu blog ‘Get in my belly’, como has mencionado eres autora invitada en
365mad.com y tienes página propia en 11870. ¿Te has planteado el uso de otros
soportes digitales como Youtube, Instagram o Pinterest que se diferencian en la
forma en que se presenta el contenido? Quiero decir, más allá de lo escrito y
profundizando más aún en la imagen.
Tengo
Instagram, Twitter -aunque muchas veces en lugar de usar Twitter solamente para
el blog pongo opiniones y cosas personales, que a lo mejor no debería… Pero bueno,
mi blog y yo somos uno (risas). Pinterest lo tengo con el nombre de ‘Get in my
belly’ también -cada vez lo uso menos-, estoy registrada en Foursquare con el
nombre del blog -aunque este lo uso casi nada porque se me olvida, entre tomar
fotos de la comida y comer, ya poner dónde estoy en ese mismo momento es
demasiado para mí, que luego me siento en un restaurante y no dejo el móvil en
paz, y no disfruto la comida ni la compañía-. También uso Foodspotting con el
nombre del blog. Me gustan mucho Instagram y Foodspotting, van directos al
grano.
¿Qué
es Foodspotting? ¿En qué consiste?
Es
una aplicación en la que pones la foto de algún plato, el nombre del
restaurante y lo localizas en el mapa. Lo guay es que te dice los lugares que
otros usuarios han registrado en los alrededores de donde te encuentras, así
que si viajas puedes buscar en esta aplicación a ver si alguien ha recomendado
algún sitio/plato en el barrio donde tú estás.
Estudias
Comunicación y Literatura en inglés en la universidad Saint Louis de Madrid,
además de estar diplomada en artes escénicas. ¿Es el ámbito de la comunicación
lo tuyo?
Trabajé
en un telediario en Guatemala como reportera becaria, también estoy diplomada
en traducción -que es a lo que me quiero dedicar después de que me gradúe en
diciembre, si es que puedo-, aunque quiero hacer un curso en traducción simultánea
porque me gusta mucho estar con la gente. Creo que sí, el mundo de la
comunicación me fascina, me divierte y lo que es más importante me entretiene.
No suelo aburrirme en esto, y es por eso que no lo abandono; suelo abandonar
casi todas las actividades que hago porque me terminan aburriendo. El mundo de
la comunicación, de momento, no ha llegado a aburrirme, y dudo que lo haga
porque me encanta. Lo malo es que, en los tiempos que corren, dudo mucho que el
mundo de la comunicación sea un trabajo factible.
¿Qué
puedes contar de tu paso por Guatevisisión?
Pues
que si en algún lugar he aprendido fue allí. Entré y mi primer día me enviaron
a hacerle una entrevista a un pintor, me subieron a la furgoneta con un camarógrafo
y a buscarme yo las castañas. Tuve un compañero de trabajo que me ayudó y me
enseñó en mi tiempo allí, que fue breve pero intenso. Aprendí una lección de
humildad porque todo era trabajo en equipo, nada es solo para ti y dependes de
la ayuda de todos los que te rodean. Tienes que estar disponible y atento. Lo
malo fue que el telediario no tenía dinero y después de tres meses tenía que ir
a sitios recónditos de la ciudad a horas que no me correspondían por cero
dinero... Y me fui cansando, más aún porque yo entré como reportera, porque iba
a trabajar como presentadora del telediario después. Pero no pudo ser, así que
vi que ya no tenía nada que hacer allí. Además, Madrid me llamaba al mismo
tiempo que Guatevisión me aburría, y moría de ganas por volver a Madrid.
¿Era
tu aspiración ser presentadora del telediario?
Sí,
hice un curso de presentadora -como verás me abundan los cursillos que luego no
sirven para nada- porque después de estudiar teatro quería volver a Guatemala y
se me había presentado la oportunidad. Ensayaba en el plató de Guatevisión, el
jefe me lo permitía porque me había ofrecido entrar en el telediario. Lo que
pasó fue que al llegar allí me di cuenta de que las presentadoras que ya estaban
allí tenían contratos a largo plazo... Así que usando la lógica vi que no tenían
intención de contratarme.
Entre
blogs, artes escénicas, periodismo… ¿Se puede decir que eres una comunicadora
nata?
Parece
ser que sí, no me había dado cuenta hasta ahora que estoy escribiendo todo esto
(risas). Será por mi padre, que es
periodista. Yo siempre quise serlo, pero nunca me sentí lo suficientemente culta
o inteligente para hacerlo… Creo que es por eso que me dedico a otras áreas de
la comunicación.
Eres
natural de Guatemala, ¿cuáles crees que son las principales diferencias entre
la gastronomía española y la guatemalteca?
La
gastronomía guatemalteca está basada en la carne de res, poco pollo, poco pescado y menos verduras que en España;
muchos caldos y cocidos. Aquí la patata se usa muchísimo y allá se come cocida
como parte de algún otro plato, nunca como plato principal. Las ensaladas no
son parte de la dieta, aunque ahora cada vez más entran en la vida diaria –que,
como en todas partes, todos quieren adelgazar-. En Guatemala no pueden faltar
los frijoles y las tortillas de maíz. España tiene más variedad y
disponibilidad de ingredientes y platos internacionales que en Guatemala no
hay.
¿Y
Hay influencias entre ambas?
La
dieta mediterránea se imita cada vez más en Guatemala, pero aún falta mucho
para que se imite al día a día y en el hogar de todos los guatemaltecos; te
dije que la carne que se come en Guatemala es de res, pero también se come
mucho de cerdo, o marrano, como decimos nosotros. No hay influencias entre
ambas, pero veo que aquí en España cada vez hay más restaurantes mexicanos y
sudamericanos y cada vez se venden más productos latinoamericanos en los
supermercados. Lo mismo en Guatemala: allá ahora lo "in" es juntarse
a cenar unos quesos y vinos, las tapas... Lo que no tiene uno lo quiere el
otro, lo de siempre.
Cuando
se trata de hacer la compra, sobre todo a la hora de cocinar en casa, ¿tienes
preferencias?
Prefiero
ir al mercado que tengo al lado -el de Anton Martín-, es más barato, hay más
variedad y esta todo más rico. Lo que pasa es que claro, como casi nunca estoy
en casa, luego vuelvo a casa y tengo que pasar por El Corte Inglés o algo así
porque el mercado ya está cerrado… Pero si puedo voy al mercado. La compra del
mes en Carrefour Online, aunque mi favorito es Mercadona por los precios y la
variedad, pero no tengo ninguno cerca. Al Día voy por barato, pero lo odio.
Pasemos
ahora a hablar de restaurantes: ¿cuáles son, en tu opinión, los mejores
restaurantes de Madrid?
¡Uy!...
No sabría decirte porque no los he probado todos, pero según mi experiencia, que
mas que nada se basa en un presupuesto bastante accesible, tendría que decir
que ‘La Sanabresa’,
‘Maceiras’, ‘Taquería Mi Ciudad’ y el mejor ‘LeCafe’.
¿Y
de Barcelona? Porque también has escrito sobre alguno en tu blog.
(Piensa
durante unos segundos) Pues solo he estado una vez en Barcelona, así que no
tengo ni idea, pero de los que he probado te diría que ‘El Vaso de Oro’.
¿Y
más allá de España qué recomiendas?
Estados
unidos. Un sin fin de opciones, lo tienes todo y lo tienes bueno. Siendo un país
de inmigrantes siempre encontrarás a nativos que te ofrecen los mejores platos
de su país; lo que sea lo encuentras, pero bueno, hay que currárselo también,
que hay mucha cosa mala, mala.
Y
algo muy importante, ¿qué no recomendarías nunca?
(Silencio
durante unos segundos) Hay que probarlo todo que, si no, no tienes con que
comparar. Ahora, si me presionas, te diré que nunca recomendaría las pizzas de
las pizzerías que hay ahora en cada esquina; no es que no las haya probado, ni
que no te saquen del apuro o que no estén mínimamente buenas, pero
recomendarlas, pues no, nunca lo haría.
Respecto
al vino, no sueles mencionarlo tan específicamente en el blog. ¿Cuál sueles
pedir o recomiendas?
Si
me toca a mí escoger pido ribera, pero siempre que salgo a cenar dejo que mi acompañante
decida, que yo no tengo mucha idea. Mi esposo sabe mucho más que yo, así que,
que escoja él (risas).
Se
suele afirmar que la gastronomía española destaca por encima del resto. ¿Crees
que se merece esta afirmación?
Sí,
creo que la gastronomía española tiene una variedad y calidad que no tiene
ninguna otra.
Desde
que se aplicó la subida del IVA reducido –hostelería- del 8% al 10% a partir
del 1 de septiembre, ¿has notado el incremento de precios? ¿Ahora comes menos
en restaurantes?
No
lo he notado porque a los restaurantes que he ido no han subido el precio.
Ahora
bien, hace dos años que ceno menos fuera... No me alcanza el dinero.
¿Y
Crees que esta medida perjudicará a los restaurantes?
Sinceramente
no he visto esta subida de precio en los restaurantes, pero si lo hacen sí que
va a afectarlos. Irá menos gente, menos veces.
Durante
los últimos años hemos visto cómo a numerosos ‘bloggeros’ les ofrecían la
oportunidad de trabajar en medios de comunicación como colaboradores, invitados
o ‘bloggeros’ en la versión digital del medio. Además de 365mad y 11870, ¿te
han ofrecido otras colaboraciones?
El
Huffington Post, pero al final no cuajó la cosa, no llegamos a ningún acuerdo y
ya no colabore con ellos.
¿Y
te gustaría trabajar en/con algún medio concreto? ¿En el campo gastronómico o
te gustaría probar en otros?
Sí,
me encantaría. Me gustaría trabajar en la Guía Repsol, por
ejemplo.
¿Por
qué?
Los
sigo por Instagram y no paran, están en todas partes y a todas horas, en convenciones,
ferias, restaurantes, comiendo y bebiendo todo el tiempo. Yo quiero formar
parte de ese tipo de eventos y actividades, más que nada porque creo que tengo
mucho que aportar e informar.
‘El
Comidista’ se ha convertido en fuente de consulta para todo lo relacionado con
la comida. ¿Qué opinas sobre su autor, Mikel López Iturriaga?
Al
principio me gustaba, me encantaba. Luego compré su libro y me defraudó un
poco, me parece un poco soso. Creo que esta sobrevalorado.
Eso
sí, ha sido muy inteligente sabiendo lo que gusta y cómo le gusta a la gente. Él
es digno de admirar: él cocina y yo no, él es el rey de los blogs de cocina y
yo no. Así que el hecho de que no me guste mucho tiene que ver con los celos
creo yo (risas).
¿Y
crees que su libro ‘Las receta de El comidista’ es útil? ¿Se lo recomendarías a
alguien que no sabe cocinar o le aterra?
Sí, por
supuesto, tiene recetas muy sencillas. Lo que pasa es que a mí no me gustan
muchos de los ingredientes que usa, pero seguro que a muchas otras personas sí
que les gustan. El libro tiene recetas sencillísimas, rápidas y buenas. También
recomendaría el de Falsarius Chef a todo aquel que le dé pavor cocinar, con ese
arrasas.
¿Y
por qué el de Falsarius Chef?
Son
recetas de comida supuestamente súper elaborada pero a base de latas, productos
precocinados y cosas por el estilo.
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